Si sospechas que tu hijo puede tener autismo o si ha sido diagnosticado con autismo, seguramente tendrás varias preguntas sobre lo que es el autismo, qué lo causó, cómo se vive con eso, qué retos habrá, si algún día se “curará” y la mejor manera de atenderlo, entre otras más.
Ante esto, será importante y necesario buscar ayuda de especialistas que te escuchen, asesoren, y acompañen. Debes tener presente que por cuenta propia no será fácil saber qué hacer, pues cada niño es diferente y no todo lo que es o fue útil para uno da garantía que será útil para otro.
A continuación te compartimos información, en un intento de dar respuesta a las preguntas más apremiantes que puedas tener.
¿Qué es autismo?
Es una alteración del neurodesarrollo que afecta el funcionamiento de la persona en las áreas de comunicación e interacción social, por lo que se observan dificultades para que responda y se “enganche” con otras personas. También afecta la conducta, pues se reduce la gama de intereses y actividades las cuales se tornan restringidas y repetitivas y es altamente frecuente que se presenten alteraciones sensoriales.
El autismo se manifiesta claramente entre los 18 y 36 meses de edad aunque pueden observarse síntomas desde antes de los 12 meses, principalmente por la dificultad de responder a las otras personas. Se presenta diferente en cada persona razón por la que el nombre oficial del autismo es: “Trastorno del Espectro Autista”.
¿Cómo sé si mi hijo(a) tiene autismo?
Si observas dificultades para engancharse y relacionarse de manera recíproca, una atención más enfocada en objetos que en personas, conductas repetitivas o atípicas, por ejemplo usar los objetos de manera peculiar e intereses restringidos o limitados, será importante que consultes a una institución especializada o algún especialista y que solicites una evaluación para saber si tiene o no autismo. No esperes a que cumpla con determinada edad, una atención temprana y oportuna dará un mejor pronóstico.
¿Cómo se diagnostica el autismo?
No hay pruebas de laboratorio ni estudios neurológicos específicos mediante los que pueda diagnosticarse el autismo. Este diagnóstico se da gracias a una observación minuciosa y detallada de la persona al relacionarse con otros y el análisis de su conducta e historia del desarrollo, asimismo mediante entrevista con sus padres. Un diagnóstico que se establece solo por entrevista o cuestionarios a padres sin observar ni interactuar con el niño, no será confiable.
¿Hay niveles de autismo?
No hay niveles de autismo, lo que existe son niveles de apoyo que se determinan conforme al perfil de habilidades de comunicación y características de la conducta de cada persona.
¿Cuáles son las causas del autismo?
Actualmente se considera que las causas de este trastorno son el resultado de complejas combinaciones de condiciones genéticas y factores ambientales. Es importante saber que no existe relación alguna entre las actitudes de los padres y el autismo.
¿Las vacunas causan autismo?
A pesar de que hay evidencias sobre el efecto adverso de ciertas vacunas como inflamación del cerebro, convulsiones, desmayo, etc., no se ha comprobado una relación directa de causa entre vacunas y autismo. No pases por alto que las vacunas protegen de muchas infecciones y enfermedades.
¿Se cura el autismo?
El autismo no es una enfermedad, por lo que no se puede hablar de una cura. Sin embargo, actualmente se comienza a hablar de la posibilidad de modificar el curso del autismo, sobre todo cuando la atención inicia a edad temprana. Una oportuna atención “personalizada” permite que las personas con autismo mejoren notablemente a cualquier edad. Esta es la mejor forma de mejorar el pronóstico.
¿Síndrome de Asperger y Autismo es lo mismo?
Desde el año 2013, el trastorno o síndrome de Asperger fue eliminado del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría. Principalmente, porque sus criterios de diagnóstico no eran confiables y se prestaban a confusión, motivo por el que ahora se considera dentro del Espectro Autista. Aunque el Síndrome de Asperger fue un diagnóstico que se usó para personas que tenían o mostraban un alto desarrollo de lenguaje y un nivel intelectual alto o por encima del promedio, era común que presentaran fallas importantes para relacionarse o comunicarse, así como un repertorio de intereses limitado o restringido, lo que significa que presentaban fallas propias del autismo.
¿Puede ir a la escuela regular mi hijo con autismo?
Si. La educación es un derecho por lo que los niños con autismo deben gozar de éste. Probablemente tu hijo(a) no cuente con habilidades que le permitan desempeñarse de manera independiente en el aula, pero esto no debe ser un impedimento para integrarse en una escuela. Probablemente, requiera de una persona capacitada que lo acompañe y le brinde los apoyos necesarios para su éxito escolar y social. También será necesario brindar apoyos a la comunidad escolar, es decir, maestros, directivos, alumnos y padres de familia.
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